Después de un tiempo, la presencia escolapia sigue siendo fiel al proyecto inicial de desarrollar la misión escolapia en contextos pobres, aunque con muchas novedades de desarrollo carismático y misionero. Todas estas pistas aparecen ahora como signos de madurez y compromiso con las personas, con los niños y los jóvenes, con la institución Fe y Alegría, con la Iglesia local, y especialmente con los más pobres.
La presencia escolapia está presente en dos comunidades, una en Ñaña y otra en San Juan de Lurigancho. Ambas comunidades comparten la misión tanto religiosos escolapios como escolapios laicos. El Padre Pedro Aguado, Superior General, y el Asistente General por América, P. Julio Alberto Álvarez, estuvieron reunidos con ambas comunidades, en asamblea de la presencia escolapia del Perú, con alumnos, grupos directivos, grupos de maestros, grupos de alumnos, grupos vocacionales tanto de varones como de mujeres, grupos de pastoral, grupos de Movimiento Calasanz. Por su parte, el P. Pedro Aguado se entrevistó uno a uno con cada miembro de las dos comunidades escolapias.
La presencia escolapia en Perú se desenvuelve en tres colegios Fe y Alegría 4, 5 y 41. Así como, un bello desarrollo de Movimiento Calasanz en cada presencia, una decidida cultura vocacional, acompañamiento de los jóvenes interesados en nuestra vida escolapia y la formación de academias para los jóvenes que completan su formación para ingresar a la Universidad.
Los colegios Fe y Alegría que acompañan las comunidades escolapias acogen a más de 3000 alumnos, en un contexto de precariedad alimenticia, académica, de acceso a la educación, y en contextos familiares con profundos desafíos de desarrollo integral.
Esta presencia escolapia ofreció, con profundo agradecimiento con el P. Pedro Aguado, lo mejor que ellos han cultivado durante estos años: el amor a Calasanz en la niñez y la juventud. Alegría grande en el Padre General de ver la lucha constante de la demarcación de Nazaret y su diligente acompañamiento. Nuevos horizontes se vislumbran en la reciente obra escolapia.
Gracias al P. Oswaldo, Padre Provincial de Nazaret, por liderar la provincia con un proyecto generador de esperanza, así como, bajo un liderazgo de acompañamiento y generador de procesos.
Gracias a los actuales miembros de las comunidades escolapias en Perú: P. Carles Such, P. Lizardo, P. Jaime, P. Juan Pablo, P. Juan Carlos Sevillano, Hno. Juan Diego Botero, Daisy y Gloria, por su testimonio de entrega y fidelidad creativa al carisma de Calasanz.
Gracias a los niños y jóvenes por mostrar su amable corazón en cada sonrisa, en cada apretón de manos, en cada saludo respetuoso y amistoso; gracias por recordarnos que ustedes son la razón por la cual las Escuelas Pías llegaron al Perú.
Gracias, P. Pedro, por tu incansable trabajo en la Orden.
Tomado de: Scolopi.org
Galería de la visita
